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ANIVERSARIOS - Conjuro musical contra el 18 de julio de 1936


El 18 de julio de 1936 las fuerzas militares de la derecha española inician el alzamiento y golpe contra la II República. Es así que comienza la Guerra Civil, que duraría tres años y sentaría un  antecedente de la siguiente guerra en toda Europa desde 1939 a 1945. Después de la derrota de la República se instalaría el franquismo por casi cuarenta años, dejando la dolorida memoria que se agita persistentemente cada vez que asoman los horrores de esa época.

La Guerra Civil Española resultó movilizadora  para las izquierdas del mundo, y aunque con importantes diferencias entre ellas muchos de sus miembros se alistaron para combatir en España o se dedicaron a acompañar y ayudar a la República desde sus respectivos países.

De aquellos enfrentamientos y de los milicianos que los llevaron esforzadamente  a cabo perduran muchas enseñanzas y muchos recuerdos, entre ellos,  las canciones. Las  queridas canciones de la Guerra Civil Española  resultan para esta fecha un conjuro triunfante sobre el  18 de julio de 1936.
Siguiendo el enlace, las versiones de las más conocidas de ellas según el grupo El violinista del amor y los pibes que miraban

Canciones de la Guerra Civil Española

sábado

LA LÓGICA DE LA PICA. Argentinos, brasileños y el tercero en discordia.

Brasilera con su bandera reformulada como alemana
En la suma de las mujeres a seguir  con pasión el Mundial hay varios agregados imprevistos que los hombres no contemplan porque ya los tienen incorporados en su práctica futbolera. Uno de ellos es la pica. 
La pica futbolera entre argentinos y brasileños es conocida, antigua y fervorosa, pero muchas mujeres no adhieren a ella, o  la desconocen,  o no la comparten. No entienden cómo no se quiere apoyar a una selección latinoamericana si juega contra una europea (¡ah, la Patria Grande!); no adhirieron para nada a los festivos bocinazos  por la derrota humillante que Alemania propinó a Brasil y se compadecieron por su sufrimiento. Otras, recordando Sudáfrica 2010,  temieron que los alemanes les hicieran otra vez algo parecido  y poniendo las barbas que no tienen en remojo no hicieron ni un gesto de celebración. 
Pero además del Mundial  lo que muchas mujeres tienen es carencia de pica  todo el año. Si no siguen a algún club (Boca contra River, Independiente contra Racing,  y así en todo el país)  y no están más o menos  involucradas en alguna hinchada, la "pica" les es desconocida como sentimiento propio. Y entonces, cuando llegan estos Mundiales sobre los que se vuelcan toda clase de expectativas políticas, culturales y de identidades, además de deportivas, miran con asombro y rechazo la pasión por que el otro pierda tanto o más que por que  gane el de uno. No entienden que esas pasiones tan subalternas estén por encima de la identidad latinoamericana o de otros supuestos políticos. 
Y en este punto estamos las mujeres hasta que la pica, sin pedirnos permiso para abrir debate, se nos cuela en las vísperas. A empujones muy poco fraternos nos hace entrar en ella, recordándonos que los brasileños, ofendidos y humillados por los alemanes, no hincharán por Argentina. Hincharán porque Alemania nos ofenda y nos humille tanto como a ellos, si es con ocho goles mejor, y así las cosas se emparden. Porque para la pica lo más importante de todo es el contrario, el oponente del par, y no hay nada en el universo futbolero, ni siquiera el más grande ofensor, que pueda romper ese par. 
Creer o reventar, mujeres. 


La pica en su esplendor, en nota de la Nación