Mostrando entradas con la etiqueta Videla. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Videla. Mostrar todas las entradas

viernes

Muerte de un dictador

Hoy ha muerto Videla. Así lo replican  los medios nacionales y de todo el mundo, y se intercambia por las redes sociales y  por los teléfonos, y se comenta en los trabajos y en las familias.
Uno escribe eso, que ha muerto,  y lo siente extraño: ¿de verdad ha muerto? No es su edad la  que contradice la idea, la que por supuesto llevaría  a entenderla como natural.  Su muerte no se siente como natural.  La imagen  de  que haya fallecido debe atravesar la terrible memoria: su poder de Señor de la Muerte no se condice con que a él mismo le haya llegado su turno.  La idea debe atravesar mis  muros de incredulidad: ¿de verdad  él mismo era finito entonces? “Entonces”, cuando el país estaba doblegado  bajo su oscuro mandato y cuando  era impensable que el mismo que mataba tan  soberanamente pudiera morir.

Se encontró con ella, o ella lo encontró, en su celda de la cárcel de Marcos Paz. En cárcel común, con condena por delitos de lesa humanidad. 

Yo escribiría en su lápida: “Fue dictador hasta el final”.